Autor: Elisabetta Gnone
Fairy Oak es un pueblo mágico y antiguo, escondido en los pliegues de un tiempo inmortal. Para encontrarlo habría que viajar entre las mesetas escocesas y los acantilados de Normandía, por los valles floridos de Bretaña, entre los verdes prados irlandeses y las bahías del océano. El pueblo está habitado por criaturas mágicas y seres humanos, pero es difícil distinguir a unas de otros. De hecho, hadas, magos, brujas y ciudadanos normales viven en sus casas de piedra desde hace tanto tiempo, que nadie presta ya atención a las rarezas de los otros. Y después de tanto tiempo, ¡todos se parecen un poco! Todos salvo las hadas, que son muy, muy pequeñas y luminosas...¡y vuelan! Los magos y las brujas del valle las mandan llamar para que cuiden a los pequeños del pueblo. Esta historia está contada, precisamente, por una de ellas: Felí, el hada de las gemelas Vainilla y Pervinca.
La trilogía :
El secreto de las gemelas, el Encanto de la Oscuridad y el Poder de la Luz.Los 4 misterios
Capitán Grisam y el amor:
Los hechiceros días de Shirley:
En este segundo libro conoceremos mejor a la Banda mientras que los niños cobran cada vez mayor protagonismo. Les acompañaremos en su aventura de resolver un misterio mágico y fascinante con aventuras y peligros. Aunque el final no me convence mucho (al ser una profecía antigua es un poco absurdo la solución del enigma...) es un libro que de nuevo me transporta hacia aquel valle tan apacible con la primavera floreciendo, donde me llega a la nariz la fragancia de la Tienda de las Exquisiteces mezclado con la leña que acaba de traer el leñador McDoc, el sonido del herrero Martagón en su taller creando a saber qué, Roble charlando con los niños, las risas de éstos, y si nos acercamos al puerto, el sonido de la marejada chocando contra el acantilado y sobretodo el bosque, aquel bosque tan especial que canta...y así, descubriremos la magia.Flox sonríe en otoño:
Éste libro me ha gustado, como los otros, pero el final no me satisface. No sé, las explicaciones esas...sin embargo, he disfrutado tanto con los detalles y las escenas en general que lo compensa. Escenas cotidianas, tiernas, alegres, interesantes y divertidas donde se descubre la amistad. Cuenta sobre unos hechos extraños que suceden siempre en otoño y Flox se decide a averiguar el motivo. Además que los niños tienen una nueva misión: desenmascarar a cierto desconocido envuelto de negro....para descubrir finalmente un amor secreto.
Adiós, Fairy Oak:
Éste, sin duda, ha sido el mejor libro de los cuatro. No cuenta ningún episodio importante sino simplemente detalles del día a día de las gemelas desde que están en la cuna. Aún así, esos sucesos son horriblemente intrigantes y a mí me han encantado. Creo que fue por pura desesperación de saber más y más del valle de Verdellano. Y se me ha hecho increíblemente corto, me pasaría la eternidad leyendo sandeces sobre ellos porque la forma en que lo narra te hace ser un habitante más de allí y es...mágico. El adiós me ha hecho estremecer y me he quedado "¿queeeeeeeé?". Desde luego, el final sorprende y deja a uno con las ganas de seguiiiiiir, insatisfecho por haberse perdido la escena que se esperaba. Muchas cosas no se cuentan, simplemente se dejan a la imaginación del lector y yo estoy demasiado triste por tener que dejar definitivamente esta maravillosa saga. Desde luego, magnífico.
Le doy 5 estrellas




(Por cierto, gracias a la autora de Magia y hechizos eternos por la reseña)
esta es una super aventura,quisiera vivir en verdellano
ResponderEliminarA mí también me encantaría anónimo
ResponderEliminarMadre mia tienes un blog presioso!!! lo digo enserio, se ve que te gusta leer y sobre todo libros tan bonitos como es fairy oak :) estoy empezando con blogger y simplemente tengo un solo seguidor, q soy yo ;( sigueme por a te lo agradeceria un monton :)) UN KISS <3
ResponderEliminarMe gustaría saber más sobre lo que e pareció el final de "Adiós, Fairy Oak" yo cuando lo he leído todo ha ido muy bien en el principio, pero cuando llegué a la parte de la historia principal, y después, me apareció el título "El Adiós" ¡Ya sentía el nudo en la garganta!
ResponderEliminarVerás, a mi me da mucha nostalgia y me encariño mucho con los momentos y las cosas, y el hecho de verlas irse, verlas que "mueren" o que simplemente su momento ya pasó me da muchísima tristeza, aunque me consuela saber que vendrá algo nuevo de lo que encariñarme (aunque vuelva a pasar lo mismo).
Estoy aprendiendo a no encariñarme con las cosas, pero en el momento que leí ese libro no; es más, me estaba despidiendo de muchas personas que me habían acompañado todos los días durante ocho años y nos tocaba un final inevitable. Me acuerdo muy bien (daré unos spoilers, así que tengan cuidado), en octubre lo compré en una librería en oferta, yo ya tenía a "Capitán Grisam y el amor" y "Flox de los colores" para leer, pero simplemente no los veía como libros de octubre, entonces me lo compré y lo comencé a leer de a muy poquito (por los exámenes, cursillos, cursos de apoyo, escuela durante la tarde y salidas). Pasó todo el mes de octubre sin llegar a la página 100, y a fines de noviembre me fui a la casa de mis abuelos, en un pueblo muy cálido y pequeño al norte del país con mi papá. El día anterior al viaje leí como hasta la mitad, en el viaje cincuenta páginas, en la casa de mis abuelos hasta dos capítulos antes del final y decidí que a las doce de la noche leería el final.
Las palabras en ese momento del libro retumbaron en mi mente, alma y corazón como espadas que se clavaban "¿Irme... ya?" "Trataba de mirar lo más posible cada milímetro de sus rostros, para no olvidarlos nunca" "¿Prefieres verlas llorar y gritar tu nombre mientras te vas?" el hecho de que las gemelas ya por poco ni se acordaban de Feli me derrumbó, ¿¡Cómo podían olvidarse de esa persona tan importante?! Entiendo que buscasen libertad de una vez por todas, pero ¡Dentro de poco no la verían nunca jamás! ¡Que dolor! ¡Y se estaban olvidando de ella! ¡Mamá Dalía tenía su primera cana y Feli como no tenía trabajo estaba ayudando con las tareas de la casa! Eso me dolería tanto, no por hacer tareas del hogar, si no porque ya terminó y me iría para siempre, porque ya no me necesitan y les soy inútil. Y cuando se fue en la parte de atrás de la carreta de Barbo Tágix, mirando como el día comenzaba otra vez, más el gesto de Tomelilla que decía "Eres libre Feli, te lo agradezco mucho, lo has hecho bien, adiós, y aceptación" lo dijo todo con ese simple asentimiento.
En mi cabeza, mientras todo ese catástrofe sucedía no paraba de oír la canción de Nino Bravo "Un beso y una flor" a gritos. Y mientras me ahogaba en mis propias lágrimas y no podía gritar porque despertaría a todo el pueblito mojé toda la almohada y a la mañana siguiente tenía arrugas en los ojos por dormirme en agua salada.
En fin, ¿Qué has sentido?